Baltasar Vallarino
Editorial Caballo-Dragón, 1990
ISBN: 84-86632-08-0
Sinopsis:
La vida de un negrero contada en primera persona.
¡Con la cantidad de barcos que siempre tuvo España y mira que hay poca literatura sobre navegación! Es como si escociera la derrota americana; como si en Cavite se evaporara el mar. El espíritu del campanario que atenazó la literatura española a partir del 98 circunscribió nuestra angustia a tierra firme. Firme, pobre y de menguados horizontes. De ahí la novedad y a belleza de los cinco relatos cortos que componen El marinero africano: batallas de negreros contra la Flota inglesa, los bajos fondos de La Habana colonial, el desgarrado humor de marinero roto, la espantosa travesía de los esclavos negros... De las factorías negreras de Mozambique a los mórbidos prostíbulos de Cuba, en este libro se cuenta, con una sospechosa exactitud, una historia que oficialmente no existe. Porque en España la esclavitud se abolió en 1817. Y de Cádiz no salían barcos rumbo a la costa africana y de allí rumbo al Caribe. Y los astilleros españoles no se esmeraban en la construcción de barcos rapidísimos dedicados exclusivamente al tráfico de esclavos. Y los capitanes de dichos barcos no cobraban comisión por cada esclavo que llegaba vivo. Todo eso sucedió en otro planeta, no en la España romántica de los pronunciamientos.
La prosa de B. V. es de una calidad extraordinaria; la información que nos ofrece es decisiva. No hay otro documento en nuestra literatura que refiera de u modo semejante la llegada de africanos al Caribe. Cuando la ociosa burguesía colonial con emoción despreocupada comentaba: a La Habana ha llegado un barco cargado de... esclavitud.